El tiburón nariz negra (Carcharhinus acronotus), conocido en inglés como Blacknose shark, es una especie de tiburón réquiem de la familia Carcharhinidae, que se encuentra frecuentemente en las aguas tropicales y subtropicales del Atlántico occidental. Este tiburón suele habitar en zonas costeras con pastos marinos, áreas arenosas y regiones con escombros, y los adultos tienden a preferir aguas más profundas que los jóvenes. De tamaño pequeño, el tiburón nariz negra mide alrededor de 1,3 metros de largo y presenta una estructura aerodinámica típica de los tiburones réquiem, con un hocico alargado y redondeado, ojos grandes y una primera aleta dorsal relativamente pequeña. Su nombre proviene de una mancha negra en la punta de su hocico, aunque esta puede ser menos visible en individuos mayores.
Estos tiburones se alimentan principalmente de peces óseos pequeños y cefalópodos, y son presa de tiburones más grandes. Como otros miembros de su familia, tienen una reproducción vivípara, donde los embriones se nutren a través de una conexión placentaria. Las hembras paren entre tres y seis crías a finales de la primavera o principios del verano, bienalmente o anualmente, tras un período de gestación de ocho a once meses. No se ha registrado que esta especie ataque a humanos, aunque puede mostrar comportamientos amenazantes hacia los buceadores. Tiene un valor comercial y recreativo moderado. En 2009, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos reportó la sobreexplotación de las poblaciones de esta especie de tiburones en sus aguas y propuso nuevas medidas de conservación.
Índice de Contenidos
Clasificación del Tiburón Nariz Negra: Carcharhinus acronotus
- Reino: Animalia
- Filo: Chordata
- Clase: Chondrichthyes (peces cartilaginosos)
- Orden: Carcharhiniformes
- Familia: Carcharhinidae
- Género: Carcharhinus
- Especie: Carcharhinus acronotus
Descubrimiento de la especie
El tiburón nariz negra fue descrito por primera vez por el naturalista cubano Felipe Poey en 1860 como Squalus acronotus en sus Memorias sobre la historia natural de la Isla de Cuba. Más tarde, fue reclasificado en el género Carcharhinus. El espécimen tipo era un macho de 98 cm de longitud capturado en Cuba.
Jack Garrick, basándose en datos morfológicos, sugirió en 1982 que el Carcharhinus acronotus está estrechamente relacionado con el tiburón mejilla blanca (C. dussumieri) y el tiburón mancha negra (C. sealei), mientras que Leonard Compagno propuso en 1988 que pertenece a un grupo junto con el tiburón sedoso (C. falciformis) y el tiburón punta negra de arrecife (C. melanopterus). Los análisis moleculares han mostrado resultados ambiguos sobre las relaciones filogenéticas del tiburón nariz negra: el análisis de alozimas de Gavin Naylor en 1992 lo situó como el miembro más basal de Carcharhinus, mientras que el análisis de ADN ribosomal de Mine Dosay-Abkulut en 2008 encontró afinidades con el tiburón punta negra (C. limbatus) o el tiburón cola pequeña (C. porosus). El tiburón nariz blanca (Nasolamia velox), encontrado en la costa occidental tropical de América, podría haber descendido de tiburones nariz negra afectados por efectos teratogénicos de la ciclopía incipiente.
Características físicas
El tiburón nariz negra tiene un cuerpo delgado y aerodinámico, con un hocico largo y redondeado y ojos grandes. Frente a cada fosa nasal, hay un colgajo de piel bien definido que enmarca las aberturas nasales. Posee entre doce y trece filas de dientes en cada lado de la mandíbula superior y entre once y doce en la inferior, con uno o dos dientes en el centro. Los dientes son triangulares y oblicuos, con bordes serrados; los superiores son más robustos que los inferiores. Los cinco pares de hendiduras branquiales son cortas y miden menos de un tercio de la longitud de la base de la primera aleta dorsal.
La primera aleta dorsal es pequeña y ligeramente falciforme, con un ápice puntiagudo y una parte trasera corta y libre; su origen está sobre las puntas traseras libres de las aletas pectorales. La segunda aleta dorsal es relativamente grande, aunque sigue siendo menos de la mitad de la altura de la primera. No hay una cresta entre las aletas dorsales. Las aletas pectorales son cortas y ahusadas. El cuerpo está cubierto de dentículos dérmicos superpuestos, que tienen de cinco a siete crestas longitudinales (tres en individuos muy jóvenes) que llevan a tres a cinco dientes marginales.
Color
La coloración varía de amarillenta a gris verdosa o marrón en la parte superior y de blanca a amarilla en la parte inferior. Una mancha oscura distintiva en la punta del hocico es más evidente en los tiburones jóvenes. Las puntas de la segunda aleta dorsal, el lóbulo superior de la aleta caudal y, a veces, el lóbulo inferior de la aleta caudal son oscuras.
Tamaño y peso
Los tiburones nariz negra generalmente miden entre 1,3 y 1,4 metros de largo y pesan alrededor de 10 kg. La longitud máxima registrada es de 2,0 metros y el peso máximo de 18,9 kg.
Dientes
Los dientes del tiburón nariz negra muestran características distintivas tanto en la mandíbula superior como en la inferior. En la mandíbula superior, posee de 12 a 13 hileras de dientes, que son triangulares y estrechos, con cúspides oblicuas y estrías más notorias en la base que en las puntas. Estos dientes tienden a volverse menos muescados hacia la parte media de la mandíbula. Por otro lado, la mandíbula inferior exhibe dientes aserrados con bases anchas. Además, en el maxilar superior hay un diente sinfisario, mientras que en el inferior puede haber uno o dos, según Compagno (2005).
En cuanto a los dentículos dérmicos, están espaciados y se superponen en la piel. Cada dentículo presenta tres crestas con puntas que se proyectan hacia atrás, como describe Schwartz (1984). Estas características dentales y dérmicas son adaptables y fundamentales para la función depredadora y la adaptación al ambiente.
Hábitat y distribución mundial
El tiburón nariz negra se encuentra en las plataformas continentales e insulares frente a la costa este de América, desde Carolina del Norte hasta el sur de Uruguay, incluyendo las Bahamas, el Golfo de México y el Mar Caribe. Prefiere aguas costeras sobre lechos de pastos marinos, llanuras arenosas y áreas con escombros de conchas o corales. Esta especie se distribuye espacialmente según el tamaño y el sexo, encontrándose los juveniles en aguas someras y los adultos en profundidades mayores a los 9 metros, siendo más comunes entre los 18 y 64 metros. Los tiburones nariz negra del Atlántico sur migran hacia el norte en verano y hacia el sur (o posiblemente mar adentro) en invierno; una migración similar se observa en el Golfo de México.
Comportamiento del tiburón nariz negra
El tiburón nariz negra es un depredador pequeño y rápido, que se alimenta principalmente de peces pequeños y óseos, como el pez puerco, corvinas, pargos, anchoas, pez cofre espinoso y pez puercoespín, así como pulpos y otros cefalópodos. En competencia por comida, su velocidad le permite arrebatar presas a tiburones más grandes, como el tiburón de arrecife del Caribe (C. perezi). Esta especie puede formar grandes bancos que a veces se asocian con anchoas y salmonetes. Los tiburones nariz negra muestran un alto grado de filopatría: se ha documentado que tanto juveniles como adultos regresan al mismo área local año tras año.
Son presa de tiburones más grandes y en cautiverio se ha observado que muestran una aparente exhibición de amenaza hacia los buceadores intrusos o hacia nuevos miembros de su especie. Esta exhibición incluye encorvar la espalda, bajar las aletas pectorales, abrir las mandíbulas y nadar con un movimiento exagerado de lado a lado. Los parásitos conocidos de esta especie incluyen los copépodos Nesippus orientalis, Perissopus dentatus, Pandarus sinuatus, Kroyeria sphyrnae, Nemesis atlantica y Eudactylina spinifera, así como tenias de los géneros Paraorygmatobothrium y Platybothrium.
Alimentación: ¿Qué come?
El tiburón nariz negra, conocido por su velocidad en el agua, tiene una dieta principalmente compuesta por peces pequeños como pinfish, corvinas, pargos, anchoas, peces cofre espinosos y peces puercoespín. Además, se alimenta ocasionalmente de pulpos, aprovechando su agilidad y destreza para capturar presas en su hábitat marino.
Reproducción y longevidad
Como otros tiburones réquiem, el tiburón nariz negra es vivíparo; después de que los embriones consumen su suministro de yema, el saco vitelino vacío se convierte en una conexión placentaria a través de la cual la madre proporciona nutrientes. Fuera de Estados Unidos, se cree que los machos se reproducen anualmente, mientras que las hembras lo hacen cada dos años. Sin embargo, frente al noreste de Brasil, el ciclo reproductivo de las hembras es lo suficientemente corto como para ocurrir anualmente. La vitelogénesis (formación de la yema en el ovario) ocurre a finales del verano, seguida inmediatamente por el apareamiento y la fertilización en otoño, con las crías naciendo entre la primavera y el verano siguientes. La estacionalidad de estos eventos significa que el ciclo reproductivo se desplaza seis meses entre las poblaciones de los hemisferios norte y sur. El período de gestación se ha estimado en ocho meses en el noreste de Brasil y entre nueve y once meses en el sureste de Estados Unidos.
Las hembras suelen dar a luz a camadas de una a seis crías en zonas de cría poco profundas, como bahías costeras o manglares; una zona de cría conocida es Bulls Bay, frente a Carolina del Sur. No se observa una relación entre el tamaño de las hembras y el número de crías. Los recién nacidos miden entre 38 y 50 cm de largo. Las hembras de tiburón nariz negra crecen más lentamente, alcanzan un tamaño mayor y tienen una vida útil más larga que los machos. Además, los tiburones del Golfo de México crecen más lentamente y viven más tiempo que los de la Bahía del Atlántico Sur. En la ensenada del Atlántico sur, ambos sexos maduran con una longitud de horquilla (desde la punta del hocico hasta la horquilla de la aleta caudal) de alrededor de 90 cm, lo que corresponde a edades de 4,3 años para los machos y 4,5 años para las hembras. En el Golfo de México, ambos sexos maduran con una longitud de horquilla de alrededor de 85 cm, correspondiente a edades de 5,4 años para los machos y 6,6 años para las hembras. La esperanza de vida máxima se ha calculado en 19 años en South Atlantic Bight y 16,5 años en el Golfo de México.
Ataques a humanos ¿es peligroso?
El tiburón nariz negra no ha sido implicado en ataques a humanos. Sin embargo, se debe tener precaución si comienza a mostrar una exhibición de amenaza. Esta especie se considera un pez de caza que ofrece una pelea respetable con aparejos ligeros. También tiene importancia comercial regional, ya que se captura tanto intencionalmente como incidentalmente mediante redes de enmalle y palangres de superficie en toda su área de distribución, especialmente frente al suroeste de Florida, Venezuela y Brasil; la carne se vende seca y salada. Los arrastreros camaroneros también capturan incidentalmente un gran número de tiburones nariz negra, lo que puede representar una amenaza mayor para su población, ya que muchos de los tiburones capturados son inmaduros.
En Estados Unidos, la pesca del tiburón nariz negra está regulada por el Plan de Gestión Pesquera (FMP) de 1993 del Servicio Nacional de Pesca Marina para los tiburones del Atlántico y del Golfo de México. A efectos de cuotas comerciales y límites de captura, se clasifica dentro del complejo de "pequeños tiburones costeros" (SCS). De 1999 a 2005, se capturó un promedio de 27.484 tiburones nariz negra (62 toneladas métricas) cada año en aguas estadounidenses. Evaluaciones de poblaciones recientes realizadas por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) han determinado que las poblaciones de esta especie han sido sobreexplotadas tanto en el Atlántico como en el Golfo de México. En 2009, la NOAA propuso una cuota separada para los tiburones nariz negra de 6.065 tiburones por año y una prohibición del uso de redes de enmalle para capturar tiburones en el Atlántico. Por el contrario, las poblaciones de Carcharhinus acronotus frente al norte de Brasil parecen estar estables, mientras que no hay datos de pesca disponibles en el Caribe. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza ha evaluado esta especie como en peligro de extinción a nivel mundial.
Otros tiburones de la misma familia Carcharhinidae
Referencias
- Schwartz, F.J., 1984. Occurrence, abundance, and biology of the blacknose shark, Carcharhinus acronotus, in North Carolina. Gulf of Mexico Science, 7(1), p.2.
- Charlier, P., 2001. Review of environmental considerations in management of the Brazil-Guianas shrimp and groundfish fisheries. FAO Fish. Rep., 651, pp.37-57.
- Castro, J.I., 1983. The sharks of North American waters (Vol. 1). College Station: Texas A & M University Press.
- Compagno, L. (2005.). Sharks of the world. London: Collins, p.288.
- Ford, R.M., 2012. Diet and reproductive biology of the blacknose shark (Carcharhinus acronotus) from the Southwestern Atlantic Ocean.
- Martin, R.A. (March 2007). "A review of shark agonistic displays: comparison of display features and implications for shark-human interactions". Marine and Freshwater Behaviour and Physiology. 40 (1): 3–34.
- McEachran, J.D. & Fechhelm, J.D. (1998). Fishes of the Gulf of Mexico: Myxiniformes to Gasterosteiformes. University of Texas Press. p. 74.